Después de tantos amores, de tantas historias, de tantos dolores, el bosque me dio la oportunidad nueva de amar y de sentirme amada por su belleza, por sus árboles.. por el simple hecho de estar viva y contemplarlo. Parecen palabras, simples palabras, pero cuando te encuentras con su inmensidad, olvidas.. olvidas todo y te entregas a la naturaleza.
Y en el medio, el recuerdo de un viejo pero siempre presente amor se hace presente en el aire.. y lo siento a él en la brisa que mueve las hojas de los árboles,su perfume, su piel.. Cierro los ojos, y me entrego a ese "deja vu" del destino que se convierte en Todos, todos los hombres a los que amé, en estas y otras vidas... y el viento se lleva ese recuerdo, esos que duelen, y se los lleva lejos..
Las gotas de la lluvia, mojan mi cuerpo y siento como una bendición en un lugar tan mágico.
Tan sólo queda el amor
tan sólo quedo yo.-
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